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Valores, hijos y relaciones familiares

“Cada pareja forma parte de un universo mas amplio conformado por las familias de origen y la propia descendencia. Cada pareja ha de recrear un nuevo orden amoroso transformando el dolor del pasado en esperanza para el futuro”

LCGS

Las relaciones con las familias de origen así como con los hijos son fuente de muchas tensiones  en casos extremos de separación cuando los límites de la propia pareja no se sienten respetadoos o cuando sse anteponen otras lealtades a las de  la propia pareja y familia.

 

Del mismo modo que existen relaciones de posesividad dentro de la pareja que suponen una violencia contra la persona existen familias que ejercen un control mas o menos sutil sobre los hijos una vez que éstos ya se han "emancipado".  De este modo hay situaciones en que la pareja se ve concidionada hasta el punto de no tener autonomia en temas  importantes por las demandas de los familiares o por las necesidades reales o sentidas de cuidados o atenciones.  Hay muchos casos de adultos casados que siguen "secuestrados" por las necesidades de sus familias de origen y que no han accedido a su  propia independencia porque exisen ataduras sutiles y emocionalmene muy poderosas que se lo impide.  Establecer limites claros y firmes respecto a las familias de origen en relación a los espacios (hogar físico) y los tiempos propios de la pareja es una necesidad fundamental para el buen desarrollo de la vida familiar. Si no se respetan estos límites las injerencias de las familias de origen constituiran ataques o sabotajes a la relación y pueden desestabilizar a la pareja por completo.

 

El nacimiento del primer hijo va a constituir una transformación radical  de la vida de la pareja.  La ruptura es total en términos de disponibildad de tiempo y energiia para ellos al quedar relegado el espacio de pareja a la s necesidades del recién nacido .  Este paso de pareja a trio viene acompañado de poderosas  emociones, a veces mantenidas inconscientes, relacionados con la experiencia de exclusión generalmente del padre que ve como la intimidad basada en la necesidad biológica del niño con la madre le expulsa y le aleja a otro lugar donde experimenta la pérdida de la vida anterior al nacimiento.

 

Los nacimientos hacen nacer la responsbiidad y la incertidumbre de ser padres teniendo que afrotar por primera vez muchas circunstancias como pareja y al mismo tiempo movilizan fuertes sentimientos de inseguridad o cuestionamiento de la propia capacidad para ser buenos padres que pueden hacer a muchas parejas tener que buscar apoyo emocional, tanto como logístico, en su entorno o buscar ayuda profesional para atravesar estas ansiedades ligadas a la complejidad emocional de constituirse en padres y recobar el equilibrio personal y de pareja.

 

Los  hijos también pueden llevar a una pareja a una crisis grave cuando no existe un acuerdo en la valoración de los problemas o en la forma de abordarlos.  Muchas veces las parejas descubren que ante los problemas de sus hijos tienen opiniones, valoraciones y formas de abordarlos muy diferentes o incluso opuestas.  Encontrar un punto de encuentro, donde converger y ser capaces de hablar desde las diferencias, sin buscar imponer el propio criterio se convierte en una necesidad imperiosa si la pareja quiere seguir junta.  Es preciso entonces entender las discrepancias en los criterios y valoraciones y buscar soluciones en forma de acuerdos compartidos de manera que los hijos reciban una referencia coherente que los padres les puedan explicar, incluso reconociendo las diferencias de criterio, pero dejando claro el valor de los acuerdos alcanzados que generan en los hijos la seguridad de "tener a que atenerse" aunque no les guste y muestren su disconformidad.

 

Desarrollo profesional, dinero, poder y relaciones fuera de la familia

"Encontrar un equilibrio entre las actividades laborales, las amistades, el ocio y la creación de un hogar supone un desafio para toda pareja en la que es preciso determinar los límites de protección para la propia relación" 

LCGS

Existen  muchos conflictos de pareja que estan ligados a como se organiza la vida individual de sus miembros. En la pareja actual el desarrollo profesional es una preocupación que en muchos casos afecta a ambos. Esta proyección profesional afecta a áreas tan importantes como la capacidad económica, la autoestima, los conflictos de poder y  la disponibilidad de tiempo para la familia.  

 

En estos casos hay que entender de que manera influyen los esfuerzos y sacrificios de uno en el otro miembro de la pareja y si la ganancia de uno individualemnte supone una pérdida o merma en la vida de pareja y fammilia.  A menudo el trabajo puede convertirse en la excusa perfecta, y socialmente reconocida, para evitar hacer frente a responsabilidades dentro de la pareja o para descuidar las necesidaades de la relación.

Las aspiraciones económicas pueden ocupar distintos lugares en las prioridades de cada miembro de la pareja y el dinero en si mismo está cargado de una multitud de valoraciones diferentes según la educación, familia de procedencia o grado de equiilibrio/desequilibrio en cuanto a cómo se obtienen los ingresos y se realizan los gastos.

 

En las relaciones con personas fuerra de la familia es necesario encontrar acuerdos donde el mantenimiento de las relaciones de amistad y el cultivo de nuevas relaciones que puedan surgir sea compatible con el cuidado de los tiempos en exclusiva para la pareja.

 

Existen también casos en que la persona aunque viva una relación de pareja o tenga familia continúa prisionera del pasado ya sea en relación a su familia de origen de la que se siente responsable y culable si no cubre todas sus necesidades o el caso de relaciones anteriores que pueden seguir vivas secretamente impidiendo la plena disponibilidad de la persona emocionalmente para la creación y sostenimiento de la relación

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